domingo, 20 de febrero de 2011

El paro no es todo lo que reluce

En nuestro mundo sofisticado y sapiente uno suele encontrar un sin fin de palabras que tienen poco o nulo significado.
Una de ellas es el paro estructural y en él se refugian y se han refugiado todos nuestros políticos para concluir que no se puede hacer nada por el paro. Por lo menos, es cierto que no han hecho nada.
Veamos el significado de lo que se apellida estructural. Del nombre no hace falta decir nada: llevamos décadas con un paro muy superior a la tan traída y llevada media europea.
Desde finales del siglo XIX hemos asistido a un cambio profundo de la sociedad. Lo que antes se hacía a mano, paso a ser hecho por máquinas. El artesano vio así desaparecer sus clientes pues la manufactura era mucho más barata que la artesanía. Y por supuesto, se fue al paro.
Los economistas (los macroeconomistas) inventaron el paro estructural como aquel paro de una profesión que ya no existía y en la cual no se podría emplear al parado. Lo cual requería un entrenamiento en otra profesión.
Así un fogonero que se encargaba de alimentar la caldera de una máquina de tren a vapor se quedaba sin empleo al sustituir estas preciosas máquinas con las útiles y "ecológicas" máquinas diesel y, más tarde, eléctricas. Siempre tenía la opción de trabajar manteniendo y alimentando las calderas de calefacción de carbón, que en España estuvieron en marcha hasta más allá de los años 80. Pero no se necesitaban tantos maquinistas ni tanto tiempo para manejar las calderas de calefacción. Y no podía ganar lo mismo que cuando conducía el tren.
Mientras que el fogonero no fuera entrenado como ayudante de maquinista (ayudantes que también están desapareciendo con la privatización de los ferrocarriles) u otro profesión, era un parado estructural.
Bien, pues prácticamente toda la Comunidad Europea y los Estados Unidos declaran que el paro actual es un paro estructural. Nadie como Charles Plosser de la Reserva Federal estadounidense, de inclinación republicana: "[Tras el estallido de la burbuja inmobiliaria] No se puede convertir un carpintero en un enfermero ni una consultora inmobiliaria en una experta informática de una planta de manufactura de la noche a la mañana. Eso llevará tiempo". Es decir, paro estructural.
Y como España tiene el mayor paro de toda la Comunidad Europea, nuestros trabajadores son los que tienen menor valor y peor formación. Por supuesto, hay excepciones: los que están empleados.
Así nadie tiene la culpa. Quizá el trabajador que no se busca la vida para entrenarse.
La desgracia es que el paro en España data del comienzo de la democracia y que nunca se ha podido controlar muy bien. Si es estructural, los sucesivos gobiernos no han hecho nada y si no es estructural (opción más que probable) no han sido capaces de sacarnos de esta situación.
La figura de más abajo es el paro anual desde el año 1976 (primer año que recoge el Instituto Nacional de Estadística, de donde se han obtenido los datos) hasta el 2011. Y si el paro era estructural es de suponer que los parados de hace 30 años se han jubilado o fallecido.
Porcentaje anual de paro 1976-2010 (www.ine.es)

sábado, 7 de agosto de 2010

Blogging in The wind

¡Si nuestros abuelos levantaran la cabeza!
Uno es capaz de escribir algo que pueden leer lectores de medio mundo, o al menos aquellos que entiendan español, desde lo alto de un cerro perdido del llano castellano. El único material es un iPad con la microtarjetita esa, el correo electrónico y, por supuesto, cobertura de telefonía móvil. Incluso sin cobertura móvil, ya que cuando uno vuelva a la civilización el correo se enviará automáticamente.

Las posibilidades son enormes, tanto lúdicas como profesionales. Un arqueólogo que esté realizando trabajo de campo puede enviar los resultados de la cata al blog del departamento. Si tiene comentarios (solicitud de aclaraciones, catas alternativas, etc.) los recibirá en su móvil y puede ahorrarse dos o tres viajes.

Lo anterior es un ejemplo, pero cualquier trabajo de campo, bien sea de ayuda humanitaria o de prospección tiene la comunicación inmediata, incluso con fotografías, croquis y otros pictogramas.

Bien es verdad que muchas de las posibilidades requieren esfuerzos extras. El iPad no tiene cámara de momento por lo que hay que enchufarle un adminículo que transfiere las fotografías. Pero todo se andará.

Un saludo.

viernes, 6 de agosto de 2010

Una entrada rápida para Filemaker Go en iPhone

Filemaker Go permite tener las bases de datos en el iPhone y en el iPad.

Os dejo un enlace (https://files.me.com/pacogarciasanz/p1fjs1) para descargar un ejemplo de prefijos telefónicos de España. El sistema de telefonía fija en España (mientras dure) utiliza 9 cifras, de las cuales las dos ó tres primeras pertenecen a la provincia (sé que lo sabéis perfectamente). En un mundo globalizado, hay teléfonos locales que pertenecen a otra provincia.

El archivo es bastante pequeño y está ordenado, al cargarse, por número de prefijo. Lo podéis cambiar en Filemaker Go fácilmente. Está probado en el iPhone, pero supongo que funcionará en el iPad, aunque la estética no sea muy buena.

Una foto de la pantalla:




















Un saludo.

Inauguración

Este es el primer blog. Y en realidad es de prueba.

¿De qué hablar?

En este momento hay un montón de temas que nos preocupan u ocupan. Desde los más nimios a los más importantes. La economía, los aspectos profesionales, nuestros aparatos electrónicos preferidos, nuestras aficiones, otros blogs… y todos estos temas se interralacionan de una forma que no llegamos a comprender completamente. Cómo se puede relacionar la imposibilidad actual de viajar, ni siquiera, a la luna (Charlie's Diary) con la penuria económica (Paul Krugman). Y cómo la penuria económica con el comportamiento chapucero de la compañías de telefonía móvil con respecto a la comercialización del último teléfono de Apple, el iPhone 4 (Carlinhos). Siento el que algunos enlaces sean en inglés, pero en internet se ha convertido en la lingua franca.

Otro tema importante que desarrollaré en un apunte aparte es la ubicuidad de los errores ortográficos en todos los blogs hispanos. Si comparamos los blogs anglosajones y los españoles, la diferencia es abismal en cuanto a ortografía. Y tiene más delito porque las palabras mal escritas están subrayadas en rojo en cualquier navegador moderno. Incluso, si uno contesta desde un móvil, también se ven las faltas ortográficas. Al menos desde un iPhone, pero seguro que también con otros móviles. Sé que hay defensores en uno y otro sentido, pero escribir bien cuesta tanto como escribir mal, siempre que se sepa escribir bien. Y ahí es donde está el quid de la cuestión.

Esto es todo por hoy.